viernes, 6 de mayo de 2011

REDIMIENDO UN MITO Parte 2: ¡ADIÓS A LAS CANAS!

Inmediatamente después de Rebirth DC Comics relanzó el título GREEN LANTERN con un nuevo # 1. Para la nueva serie Geoff se unió al ilustrador Carlos Pacheco y llevó a Hal de vuelta a sus raíces restaurándolo como un piloto de la Fuerza Aérea, en donde conoce a un nuevo interés romántico: Jillian “Cowgirl” Pearlman, otra piloto temeraria como él. Coast City está siendo reconstruida, pero tras el holocausto de Mongul la gente aún no se atreve a mudarse a la nueva ciudad, y esas dudas se reflejan en los diálogos de Hal con su hermano Jim, cuya personalidad es diametralmente opuesta a la de Hal.

Retomando los elementos clásicos de la mitología, su primer enfrentamiento es con un nuevo modelo de Manhunter, enviado por un misterioso líder. La primera aventura demuestra que Hal es valiente y osado sin el anillo, luciéndose en una espectacular escena en la cual salta de un avión destruido y carga su anillo con la batería en la cabeza del Manhunter.

Johns le aporta una especie de Comisionado Gordon en el General Stone, quien dirige la base en la que Hal trabaja y conoce su identidad secreta. Además, hay una historia entre ellos dos del pasado atada a una tragedia de la familia Jordan.
Ethan Van Sciver se encarga de las ilustraciones del siguiente arco, en el que Johns reintroduce a Hector Hammond, el humano con el cerebro super-evolucionado, añadiéndole una enfermiza fascinación con Jordan y su vida. Los orígenes de Hammond son atados con los del Shark, otro viejo villano, y el de Black Hand, todos productos de experimentos por extraterrestres que, curiosamente, alegan que el idioma alemán es autóctono de su planeta. Simone Bianchi completa la historia con ilustraciones hermosas, en un último enfrentamiento en el que Black Hand hace la primera alusión al color de la muerte.

Mongul, el hijo de uno de los destructores de Coast City, regresa junto a Carlos Pacheco en la siguiente historia, con las plantas parasíticas Black Mercy que hunden a GL y a Green Arrow en mundos hipnóticos de sus mayores fantasías. Luego de frustrar el plan de Mongul, Hal trabaja junto a Batman para capturar al Tatooed Man y restaurar la confianza y la amistad entre ambos, incluyendo una escena en la que GL le permite a Bruce probar el anillo.

Este primer puñado de historias es sencilla y principalmente cumple el propósito de redefinir al personaje de Hal Jordan y su mundo, pero no por eso dejan de ser entretenidas. Uno de los trifunfos de Geoff en estas ediciones es hacer a Hal cool para una nueva generación. Éste ya no era el Jordan con canas que escribió Gerard Johns; éste piloto temerario era fascinante y prometedor.

Sin embargo, lo mejor todavía está por venir.
“There are three ways out of this organization, Soranik Natu. One: As a failure. You may leave now if you choose that path. Two: As a corpse. The path of honor. Or three: As both of the above. The path of the fool.” Salaak

Pero Hal Jordan no era el único que disfrutaba de una segunda oportunidad. Refortalecidos en Oa, los Guardianes deciden restablecer el cuerpo de Green Lanterns por todo el universo en una mini-serie escrita por Geoff y Dave Gibbons—el artista de Watchmen—y dibujada por Patrick Gleason, cuyas ilustraciones—aunque dinámicas, épicas y complejas—a menudo se me hacen confusas a la hora de seguir la acción.

Guy Gardner y Kyle Rayner son convocados a participar en el proceso como entrenadores, lo cual no le agrada a Gardner, pero Kilowog lo convence al advertirle que según los Guardianes el universo está a punto de cambiar.

Los reclutas incluyen algunos veteranos como Brik y Stel, pero también novatos como Vath Sarn del planeta Rann e Isamot Kol de Thanagar. En esa época los dos planetas se hallaban en guerra, y el antagonismo espontáneo entre estos dos reclutas juega un papel prominente en esta historia a medida que ellos descubren cómo ser compañeros.
Pero no todos los seres consideran un honor ser elegido. Cuando el anillo del sector 1417 escoge a la cirujana Soranik Natu del planeta Korugar, ella se siente horrorizada y lo rechaza, ya que gracias a Sinestro en su planeta el símbolo de los GLs sólo representa tiranía y opresión.

Soranik se verá arrastrada a una aventura junto a Sarn, Kol, Kilowog, Guy y Kyle en el sistema Vega—que está misteriosamente fuera de la jurisdicción de los Green Lanterns—durante la cual mientras son atacados por caza-recompensas que incluyen a Fatality descubren un plan insidioso del Spider-Guild para destruir Oa.
Esto precipita el desenlace en una batalla salvaje por la supervivencia de Oa en la que muchos novatos pierden la vida por la impureza amarilla que aún no han superado, y en la que Guy logra arengar a todos los miembros, nuevos y antiguos, para un último esfuerzo en el cual utilizan al sol de Oa para destruir a sus enemigos.

Retomando la analogía de la serie de TV, ésta sería la “primera temporada” de la nueva vida de los Green Lanterns, ampliando el alcance y el potencial de una mitología que podría expandarse en múltiples direcciones.

 
Como acotación comento que una de mis escenas favoritas es la forma ingeniosa con la que Soranik oculta su anillo hasta ser rescatada por Kyle y Guy. Esta Korugariana definitivamente era un personaje digno de explorar…

“We shall begin work immediately to fortify our citadel and strengthen the Corps. Perhaps it is time to make the universe afraid of us.” Guardian



CONTINUARÁ EN LA PARTE 3:  ¡NINGÚN MAL ESCAPARÁ MI VISTA!


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